
“Expertos analizan la influencia de géneros musicales en conductas como la violencia y el consumo de drogas, mientras se debate su aceptación social y legal”
SANTO DOMINGO, (HOY) | En medio de un intenso debate público, se investiga la relación entre ciertos géneros musicales y la promoción de conductas negativas. Este tema adquiere relevancia tras observarse una cierta aceptación oficial hacia expresiones musicales que, en algunas ocasiones, se perciben como influencias negativas en la sociedad, especialmente en los jóvenes.
Destacados artistas dominicanos como Wilfrido Vargas y Ramón Orlando han expresado opiniones divididas sobre el género Urbano. Orlando, en particular, ha sido crítico, sosteniendo que para mantener su popularidad, este género a menudo se asocia con letras violentas, pornográficas, y que promueven el consumo de drogas. En su opinión, estos elementos son esenciales para su éxito en tiempos difíciles marcados por problemas económicos y sociales.
Por otro lado, organizaciones sin fines de lucro han señalado el potencial desperdiciado de la música como herramienta educativa y transmisora de mensajes sociales importantes, especialmente en países como la República Dominicana.
DIVERSAS PERSPECTIVAS SOBRE LA MÚSICA URBANA
Mientras algunos ven en la música urbana una influencia negativa, el sociólogo y folclorista Dagoberto Tejada ofrece una visión diferente. Describe este género como una forma de protesta y búsqueda de identidad entre jóvenes socialmente excluidos, criticando lo que considera un “falso puritanismo” de los detractores de estas expresiones juveniles.
La antropóloga Tahira Vargas, por su parte, desvincula la música específicamente de los altos niveles de violencia en el país, relacionándolos más bien con las deficiencias del sistema educativo. En contraste, el psiquiatra Secundino Palacios sugiere una orientación en los contenidos musicales hacia el crecimiento humano y social.
LA AMBIVALENCIA EN LA ACEPTACIÓN DE LA MÚSICA URBANA
Carmen Imbert Brugal, articulista y exmiembro de la judicatura, critica la exaltación de figuras del género urbano como El Alfa, quien ha sido señalado por promover conductas negativas a través de su música. Brugal cuestiona la congruencia de elogiar tales expresiones mientras se promueven discursos contra la violencia y a favor de la educación.
EL LEGADO DE JOHNNY VENTURA Y LA PREOCUPACIÓN SOCIOCULTURAL
El fallecido Johnny Ventura, ícono del merengue, expresó su preocupación por el impacto del narcotráfico en la música, creyendo que financiaba el género urbano en detrimento de la música tradicional dominicana. Ventura defendió la importancia del merengue, Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, para la identidad y desarrollo cultural de las nuevas generaciones.
REFLEXIONES FINALES
El debate sobre la influencia de ciertos géneros musicales en comportamientos negativos es amplio y diverso. Mientras algunos textos sociológicos y antropológicos apuntan a una pérdida de valores morales y sociales, otros argumentan que estos ritmos reflejan la realidad social y sirven como un medio de expresión para las masas.
La música, como expresión cultural, continúa siendo un tema de análisis y reflexión sobre su rol en la sociedad y su potencial impacto en las generaciones jóvenes.
Por: Marcano Sin Tapujos