
“El epicentro de la detonación se localiza en la calle Padre Ayala, mientras que informes preliminares señalan al peligroso Peróxido Orgánico 5,2 y a gases como metano y etileno como posibles causantes”
SAN CRISTOBAL, RD – A diez días de la catástrofe que sacudió el municipio de San Cristóbal, donde una explosión resultó en la muerte de 34 personas y heridas a más de 60, el silencio oficial aún reina sobre las causas. Las pérdidas económicas son incalculables y el trauma de la tragedia continúa para los habitantes de la zona.
El presidente Luis Abinader, quien se desplazó a la zona poco después del desastre, ordenó una investigación exhaustiva para esclarecer los hechos. A cargo de esta indagatoria quedó el director de Inteligencia del Estado Mayor Conjunto del Ministerio de Defensa, mayor general Jorge Iván Camino Pérez. Aunque no ha habido un comunicado oficial, El Nacional obtuvo parte de un informe preliminar que podría arrojar luz sobre lo sucedido.
Peligrosas acumulaciones
El informe señala que la detonación podría haber sido causada por la acumulación de gases inflamables como consecuencia de una “nomenclatura de gases” que generan grandes deflagraciones con ondas expansivas. Además, se apunta a la recicladora de plásticos Vidal Plast SRL, propiedad de Edward Vidal, asistente ejecutivo del Gabinete de Política Social de la Presidencia, como el lugar del siniestro. Vidal, por su parte, niega cualquier implicación en el suceso.
Una fuente militar, que solicitó mantener su identidad en el anonimato, señaló que en las instalaciones de Vidal Plast se almacenaba desde hace años el Peróxido Orgánico 5,2, un químico altamente reactivo ante cambios de temperatura. Esta sustancia, junto con los gases metano y etileno que se habían acumulado en el plástico durante años, podría haber sido la combinación fatal que desencadenó la explosión.
El empresario Manuel Hernández, anterior arrendatario del local que ocupaba Vidal Plast, también está siendo investigado en relación con el evento.
Alertas previas
No es la primera vez que la recicladora se ve envuelta en incidentes peligrosos. En marzo, un pequeño incendio en el mismo lugar dejó a dos personas con quemaduras. Tras este incidente, se instó a los propietarios a retirar los químicos peligrosos del lugar, una indicación que, al parecer, fue ignorada.
El informe preliminar presenta tres conclusiones claves:
- La empresa almacenaba y reciclaba plásticos en una zona donde se detectaron emanaciones de gases combustibles, generados por el sobrecalentamiento de dichos materiales.
- El epicentro de la explosión se ubica en la calle Padre Ayala, casi esquina con Jacinto J. Peynado. Esta información se respalda con el análisis de varios videos del suceso.
- La primera explosión fue seguida por otras deflagraciones que generaron ondas expansivas, afectando edificaciones y vehículos cercanos. Estas explosiones liberaron una gran cantidad de energía calorífica que prendió fuego a propiedades cercanas, evidenciando la gran acumulación de gases combustibles en el lugar.
A medida que la investigación avance, se espera que las autoridades ofrezcan más detalles y, posiblemente, responsabilidades. Por ahora, la comunidad sigue esperando respuestas.
Por: Marcano Sin Tapujos