
“Frente a la creciente inseguridad en Santo Domingo Oeste, ciudadanos optan por medidas propias de protección en lugar de confiar en las autoridades”
SANTO DOMINGO | En el contexto de un Gran Santo Domingo asediado por el temor y la inseguridad, los residentes de Herrera, en Santo Domingo Oeste, han adoptado medidas propias para salvaguardar su integridad, frente a lo que perciben como una desatención por parte de las autoridades. Esta situación se produce a pesar de los esfuerzos reportados por la Policía Nacional en el marco del Plan de Seguridad Ciudadana.
La sensación de vulnerabilidad y desprotección es palpable entre los habitantes de Herrera, quienes se enfrentan diariamente a los desafíos de la delincuencia en las estrechas calles del sector, repletas de establecimientos comerciales. La preferencia por instalar verjas de seguridad en lugar de acudir a las autoridades se ha convertido en una respuesta común ante la inacción percibida.
Una madre trabajadora, empleada en una ferretería local, expresó su frustración: “Aquí, cuando alguien es atracado, prefiere instalar barreras físicas en lugar de denunciar a la policía, porque sienten que no se les presta atención. La justicia debería estar para respaldarnos, pero no lo está”. Por temor a represalias, esta mujer optó por mantener su anonimato.
Esta percepción de desamparo no es aislada. Michael Feliz, residente del área, relató cómo fue víctima de un asalto hace un mes, perdiendo su celular y quedando marcado por el miedo. Otro vecino, Miguel Polanco, aunque no ha sufrido atracos directamente, ha sido testigo de cómo los delincuentes acechan a sus víctimas.
Wendy Fernández, trabajadora en una banca de lotería cercana, compartió su estrategia de permanecer alerta y visible para evitar ser blanco de atracos. Galva Reyes, vendedor de colchones con más de dos décadas de experiencia en la zona, expresó su descontento con un comentario irónico sobre las encuestas de seguridad, sugiriendo una discrepancia entre la percepción pública y los datos oficiales.
La situación en la calle México, del sector Buenos Aires, es similar. José Rodríguez y Galva Reyes reportaron el reciente robo de una computadora y la batería de un carro a un vecino, subrayando la continua amenaza que enfrentan.
Esta serie de testimonios pone de manifiesto la compleja realidad de los habitantes de Herrera, quienes, ante la percepción de una inacción policial, han optado por reforzar su seguridad de manera independiente, una decisión que refleja la profunda preocupación por su bienestar y seguridad en el día a día.
Por: Marcano Sin Tapujos