Intervención urgente en restaurantes durante el Gran Premio F1 de Canadá

El jefe de la sección de prevención, Kevin Francoeur, y dos agentes más constataron que la alarma de incendios de un restaurante en la calle Crescent no funcionaba.

“Autoridades clausuran establecimientos en el centro por graves fallas de seguridad contra incendios”

MONTREAL | Durante el primer fin de semana del Gran Premio, varios restaurantes del centro fueron sancionados severamente y algunos tuvieron que cerrar sus puertas por incumplir las normativas de seguridad. Se detectaron alarmas de incendio defectuosas, salidas de emergencia bloqueadas y decoraciones inflamables.

Un joven gerente, al ver llegar a seis agentes del Servicio de Seguridad contra Incendios de Montreal a su bistró asiático en la calle Crescent, exclamó sorprendido: “¿Realmente tienen que ser tantos?”. Esto ocurrió en plena hora de la cena, momento en que el Journal acompañaba al equipo que llevó a cabo la operación especial “Sentinela” durante todo el fin de semana. El objetivo era asegurar que los restaurantes y bares cumplieran con la regulación.

Mientras los clientes disfrutaban de sus platos coloridos, los agentes pronto identificaron varias deficiencias. Calderos apilados, cajas de cartón y hasta una plancha de cocina obstruían dos salidas de emergencia. Máscaras de gatos y banderas inflamables decoraban las paredes y el techo, respectivamente, elementos no conformes con las regulaciones de seguridad. El propietario había sido advertido el año anterior sobre estos riesgos.

Los agentes de prevención probaron una bandera colgada en el techo como decoración para determinar si cumplía con la normativa de seguridad contra incendios.

“Si las banderas se incendian, pueden caer sobre la gente y quemarlas. Todo el techo podría prenderse rápidamente”, explicó la agente Marie-Josée Diotte. Además, el sistema de alarma contra incendios estaba inoperante. Alrededor de las 20:15, el jefe de sección Kevin Francoeur ordenó el cierre del concurrido bistró: “Nadie puede entrar más”.

“La alarma estaba en silencio. No sabemos desde cuándo”, lamentó el Sr. Francoeur. “Sin el sonido de la campana, si se inicia un incendio en la cocina, no escucharemos nada”. Los cocineros guardaron la comida, y los clientes que ya estaban sentados terminaron sus comidas rápidamente. Bajo una lluvia torrencial, algunos se marcharon con sus restos de sushi en mano.

El restaurante recibió multas cercanas a los 4000 dólares, pero podría reabrir tan pronto como realice todas las correcciones necesarias, como sumergir los banderines en una solución ignífuga certificada. “Nuestra prioridad es volver a la conformidad lo antes posible. También apoyamos a los propietarios con soluciones”, afirmó Kevin Francoeur.

Casi al mismo tiempo, otro equipo de prevención cerró un restaurante en la calle Notre-Dame Oeste por tener plantas de plástico colgantes en todo el techo y las paredes, también no conformes. Más temprano ese día, se le había advertido a un propietario en la calle Peel que retirara sus plantas falsas de su terraza. “Ha invertido mucho en su decoración para destacar durante el Gran Premio… Realmente no estaba contento”, explicó Francoeur. Sin embargo, insistió: “Entiendo que es una lástima, pero tenemos una prioridad: asegurarnos de que la población y los visitantes estén seguros”.

Los agentes también verifican que los establecimientos no excedan su capacidad, algo que ocurre más frecuentemente durante el fin de semana de la F1. Pero el clima había mermado las festividades esa noche de jueves.

En el Ziggy’s Pub, ubicado en el corazón de la calle Crescent, los agentes fueron recibidos con los brazos abiertos al inicio de la noche. “Siempre son bienvenidos”, dijo el propietario, Ziggy Eichenbaum, quien aprecia estas visitas por la seguridad que ofrecen a sus clientes.

En una sola noche, dos equipos de prevención visitaron once establecimientos y emitieron una docena de actas de infracción que sumaron más de 17,000 dólares en multas. La operación “Sentinela” se realiza cuatro veces al año: en Halloween, durante las festividades de fin de año, en la Noche Blanca de Montreal y durante el Gran Premio.

Por: Marcano Sin Tapujos

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