
“El Primer Ministro canadiense se abstiene de condenar las acciones israelíes en Gaza, a pesar de las denuncias crisis humanitarias y alegatos de violaciones al derecho internacional”
OTTAWA | A lo largo de una serie de eventos intrincadamente enredados en la actual crisis Medio Oriente, el Primer Ministro de Canadá, Justin Trudeau, ha mostrado una resolución constante al negarse a convalidar las acusaciones sobre Israel de violentar el derecho internacional humanitario en su táctica asediosa en la Franja de Gaza. Este enclave, hogar de 2,3 millones de personas, se ha convertido en un teatro de bombardeos aéreos y potencial blanco de una inminente invasión terrestre por parte de Israel, en respuesta a los recientes ataques de Hamas.
A pesar de que las pérdidas humanitarias se elevan, superando las 1400 muertes palestinas y 1200 israelíes, y en un contexto donde incluso ciudadanos canadienses han sido fatalmente afectados y otros permanecen desaparecidos, Trudeau resalta una narrativa que valida el derecho de Israel a una defensa “de acuerdo con el derecho internacional”. Dichas palabras se pronunciaron durante una conferencia de prensa celebrada el jueves en Yellowknife, en los Territorios del Noroeste.
Contrapunteando la postura canadiense, Volker Türk, Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, subrayó sin ambigüedades que “la imposición de asedios que ponen en peligro la vida de los civiles, privándolos de bienes esenciales para su supervivencia, está prohibida por el derecho internacional humanitario”. Esta declaración se produce en una semana cargada de tensiones y en la que el asedio de Israel ha severamente limitado el acceso de los gazatíes a recursos vitales tales como agua, electricidad, gas y alimentos.
La equidad de la comparación entre los asedios y ataques a civiles en distintos contextos geopolíticos fue puesta en la palestra cuando Trudeau no mostró variación en su postura, aun siendo recordado de su declaración del año pasado respecto a los ataques de Rusia contra Ucrania, donde aseveró que “los ataques indiscriminados contra inocentes son un crimen de guerra”.
Por otra parte, Yves-François Blanchet, líder del Bloque Quebequense, en el marco de un simposio en Trois-Rivières, apuntó que aunque Hamas sea “un grupo terrorista de una violencia increíble”, los civiles de Gaza deben ser brindados con la oportunidad de evacuar el territorio mediante un corredor humanitario. Blanchet articula que el apoyo a Israel es imperativo para “neutralizar” a Hamas, siempre y cuando se ejecute de manera tal que proteja a los civiles involucrados involuntariamente en el conflicto.
Mientras tanto, el gobierno de Trudeau ha subrayado haber establecido comunicaciones con el negociador jefe de Israel y haber destinado un equipo de expertos a la región, aunque sin confirmar específicamente si ciudadanos canadienses están siendo retenidos como rehenes. A medida que las tensiones escalan y el potencial para más derramamiento de sangre persiste, la comunidad internacional observa con detenida inquietud, a la espera de desarrollos que puedan marcar un giro hacia la resolución del conflicto o, alternativamente, su exacerbación.
Por: Marcano Sin Tapujos